+ Wanna be a Loser {Confirmación Elite}

Se podía oír un alfiler caer en la sala de espera. Todos los gleeks esperaban ansiosos el nacimiento de Beth, los nervios y la emoción se podían sentir a miles de metros, Rachel caminaba a todos lados mientras Puck estaba siendo arrastrado por el miedo. No sabia que hacer. Pronto sería padre. La orientadora, Emma Pillsbury, llego corriendo a la sala de espera. Venia de McKinley. De inmediato corrió hasta donde se encontraba Quinn, Mercedes y el profesor Schuester. Los chico de New Directions se miraron simultáneamente, asustados, algo había pasado. Lo habían deducido luego de ver el rostro de la Srita Pillsbury. No paso mucho para que la curiosidad dominara a Rachel, que decidida a saber que pasaba se dirigió hacia el dormitorio, Mercedes salio de la habitación en el instante en que ella estaba a punto de entrar. Tenia los ojos rojos. Lagrimas salían de sus ojos. Pero no eran lagrimas de alegría, era algo mas. Un incesante "piiiiiiii" se apodero del ambiente, habían abierto la puerta, y en la cama había un cuerpo tapado por una manta blanca. El lloriqueo de una bebé se oía a duras penas. No. Eso no podía estar pasando. ¡No podía ser real, Quinn Fabray no había muerto!. Quería creerlo, pero los hechos demostraban lo contrario. Sus ojos estallaron en lagrimas. Nada estaba bien, era una pesadilla, seguro estaba durmiendo plácidamente en su cama...Quinn Fabray habia muerto.

Dos años han pasado. Los gleeks aun no olvidan aquel tragico día, lo sienten cada día como si se repitiera, habían perdido a una chica importante para ellos. Pero, los sucesos no paraban, Mercedes, Santana y Brittany se habían marchado de New Directions para ser las "Troubletones" junto a Suggar Motta. Las esperanzas se habian perdido, hasta que ella aprecio. Una chica idéntica a Quinn Fabray, tanto física como psicológicamente, Rawrie Floydnn'ikp. Ella se unió al Glee club de McKinley, era como si la rubia jamás hubiera muerto, todo volvía a la normalidad. Luego aparecieron las gemelas Jagger, ambas poniendo de cabeza el mundo de algunos, eran tan iguales y a la vez tan diferentes. Ah, pero Rawrie no llego sola, sus hermanos han decidido conquistar a todas las chicas de Mckinley sin importarle el precio. Una multitud de hermanos llegan a la vida de los losers, cada uno con metas distintas, cada uno con un pasado capaz de cambiar sus futuros. Mckinley, ultimo año, un sin fin de probabilidades que podrían enloquecer a cualquiera. ¿Que harán los chicos con los "intrusos"?